SOS

Israel sigue utilizando el hambre como arma de guerra contra los gazatíes. El plan de ocupación total intensifica un єɳσσ al que, junto a los αsєsinασs por los bσmbαrdeσs, se suman también las víctimαs de una hαmbrunα causada por el inhumαno bloqueo sionistα.

Mientras el mundo sigue con sus rutinas, en Gaza se vive una pesadilla que no parece tener fin. No hablamos solo de bombardeos o desplazamientos forzados, sino de algo aún más cruel: el uso del hambre como arma de guerra.

El régimen israelí mantiene un bloqueo brutal sobre la Franja de Gaza, cortando el paso de alimentos, medicinas y ayuda humanitaria. Lo que esto provoca no es solo escasez: es una hambruna deliberada. Niños que mueren por desnutrición. Familias enteras que se ven obligadas a sobrevivir con lo poco (o nada) que les queda. No es casualidad, es parte de una estrategia de ocupación y sometimiento.

El plan no solo αsesinα familias por medio de los bombαrdeos, sino también lentamente por la hαmbrunα. Es parte de un єɳσσ en cámara lenta, sostenido por el silencio y la complicidad internacional.

Lo mínimo que podemos hacer es no mirar hacia otro lado. Contarlo, compartirlo, exigir que se detenga esta barbarie.